Transcodificación de vídeo: ¿Qué es y cómo funciona?

¿Por qué es importante el streaming de vídeo adaptativo?

Internet es un mosaico poco fiable de miles de redes interconectadas. No hay control de extremo a extremo ni control de calidad. Algunos usuarios disponen de un enlace gigabit excelente y estable, mientras que otros tienen una conexión WiFi compartida inestable. Su ancho de banda variará.

El vídeo es, con diferencia, la aplicación más pesada de la web. Para entregar un vídeo en tiempo real a un espectador, la conexión de extremo a extremo tiene que soportar una entrega más rápida que en tiempo real. Si se produce un contratiempo o una caída del rendimiento, los vídeos transmitidos a una tasa de bits única y descargados progresivamente se almacenarán en el búfer. Y eso es una mala experiencia.

Aquí entra en juego el streaming adaptativo. En lugar de crear una sola calidad, se crean múltiples calidades de vídeos y live streams mediante el proceso que se denomina transcodificación.

¿Cómo funciona el streaming adaptativo?

Los reproductores de vídeo tienen pequeños algoritmos que comprueban el tamaño de la pantalla, la capacidad de procesamiento y el ancho de banda del dispositivo. En función de estas variables, el reproductor decide qué calidad recupera de la plataforma de streaming.

Antiguamente, el streaming adaptable se realizaba a través de protocolos propietarios, con reproductores y servidores propietarios, como RealVideo y Windows Medios Streaming.

En la actualidad, el streaming adaptativo se basa en el tráfico HTTP, con trozos de vídeo y archivos de manifiesto. Esto tiene algunas desventajas (no hay sesiones, muchos registros), pero las ventajas son el almacenamiento en caché CDN (escalado y rendimiento) y un cambio de velocidad de bits más granular.

El proceso de dividir los vídeos en estos pequeños segmentos (o trozos) se denomina transmultiplicación. Algunos transcodificadores lo hacen automáticamente, pero también puede hacerse sobre la marcha, después de la transcodificación. La transcodificación consume mucha CPU, pero el transmuxing no. Los formatos más comunes para el streaming HTTP adaptativo son HLS (web) y DASH (OTT).

Para ofrecer flujos adaptables, necesita que sus vídeos se transcodifiquen a varias velocidades de bits.

¿Qué es la transcodificación de vídeo?

Aunque la transcodificación se confunde a menudo con la codificación, se trata de dos procesos diferentes. La codificación es la creación de un vídeo o flujo a partir de una fuente. La transcodificación es el proceso de crear una o varias calidades de un vídeo (o flujo), adecuadas para su reproducción en la web. Si quieres hacer streaming profesional en la web, te conviene transcodificar a múltiples calidades y utilizar streaming con tasa de bits adaptativa en lugar de descargas progresivas. Los usuarios experimentarán una mayor calidad y mucho menos buffering.

¿Cómo transcodificar un vídeo?

1. Plataformas de vídeo

La mayoría de las plataformas de vídeo transcodifican automáticamente por ti. Sube un vídeo y, por arte de magia, crean múltiples calidades. Cobran una tarifa por minuto. Es fácil. Sin embargo, no tienes ningún control sobre las calidades y tampoco sobre el precio.

Monetizar la transcodificación es uno de los principales motores de ingresos de las plataformas de vídeo. Como esto requiere mucha CPU, lo subcontratan a servicios de terceros cloud. Y son caros. Por lo tanto, existe un incentivo potencial para reducir la calidad, lo que puede no ser de tu interés.

2. Construya su propia granja de transcodificación

A esto lo llamamos transcodificación in situ. Usted compra o alquila servidores, instala el software de transcodificación y procesa sus propios vídeos. Esto le da un control total sobre los costes y la calidad.

Puede ajustar la transcodificación y añadir procesamientos adicionales, como corrección del color, inserción dinámica de contenidos y cifrado. Control total. A menos que tenga una gran operación, puede resultar bastante caro, tanto en recursos técnicos como humanos.

La mayoría de las plataformas de vídeo no te permiten subir tu medios transcodificado directamente a sus servicios de origen. Su workflow está bloqueado con su propio proceso de transcodificación. Por lo tanto, tienes que encontrar una alternativa para el alojamiento y la entrega también.

3. Utilice los servicios de transcodificación de cloud

Una alternativa a las plataformas de vídeo y a las instalaciones locales es utilizar los servicios de transcodificación de cloud. Las clouds ofrecen servicios profesionales de transcodificación y te ofrecen mucho control sobre los perfiles. Para implantar y operar un servicio de este tipo se necesita un experto, y las clouds pueden llegar a ser costosas.

Las clouds pueden resultar caras, ya que la transcodificación es un servicio que consume mucha CPU, especialmente en live streaming. Pero es una buena alternativa entre la transcodificación in situ y la basada en plataformas de vídeo.

En el pasado, Jet-Stream también subcontrataba la transcodificación a clouds. Asumimos la inversión de crear workflows automatizada y ofrecer servicios de transcodificación de fácil acceso a nuestros clientes. Al hacerlo una vez, para muchos, y mediante la automatización, escalamos y ahorramos costes a nuestros clientes. Pero era hora de seguir adelante. Queríamos ofrecer a nuestros clientes más control sobre la calidad. También queríamos realizar la transcodificación internamente, debido al cumplimiento del GDPR. Y queríamos gestionar mejor los costes.

El año pasado decidimos construir nuestra propia cloud. Está situado en Europa, alojado en centros de datos de primera categoría, que utilizan energía verde. Y decidimos ejecutar todas las aplicaciones internamente, en nuestro propio cloud. La buena noticia es que ya disponíamos de una transcodificación workflow (GUI&API). Por tanto, sólo tuvimos que sustituir el motor.

4. Jet-Stream Maelstrom.

Lo mejor de estos tres mundos. Es más fácil que las plataformas de vídeo. Sin embargo, ofrece un control total sobre la calidad y el coste por vídeo, y le da libertad para transcodificar, cargar y automatizar el procesamiento de vídeo workflows.

¿Cómo transcodificar con Jet-Stream?

El fundamento del servicio de transcodificación Jet-Stream MaelStrom es FFmpeg. Básicamente, todo el mundo en la industria utiliza esta gran biblioteca. Creamos nuestros propios builds, con perfiles de transcodificación ajustados. Vimos muchos vídeos ;).

Además, hemos añadido perfiles adicionales: QuadHD y 4K. Y ajustamos los perfiles existentes. Además, comparamos nuestros nuevos perfiles con las antiguas salidas transcodificadas de AWS, para asegurarnos de que la calidad igualaba, o superaba, la de ese servicio.

Analizamos el comportamiento de los reproductores de streaming adaptativos. Básicamente, saltan a la tasa de bits más alta, o a la más baja. Y a veces utilizan una tasa intermedia. Hemos aprendido que 3-4 tasas de bits son suficientes para la mayoría de los casos de uso en la zona de la UE, mientras que algunas plataformas transcodifican automáticamente a 8 o incluso 12 tasas de bits: eso requiere recursos de CPU y almacenamiento innecesarios, mientras que no ofrece una mejor QoE. Por supuesto, tu caso de uso puede necesitar muchas tasas de bits, y eso está bien: lo soportamos todo.

Vea el vídeo Easy, Smart, Expert transcoding demo (6 minutos) aquí.

Tenemos una filosofía que llamamos fácil, inteligente y experta. También la aplicamos a la transcodificación. Así, Jet-Stream le da toda la libertad sobre la transcodificación:

Fácil: arrastrar y soltar

Utilizar los servicios de Jet-Stream debería ser siempre más fácil que las plataformas de vídeo. Así, basta con arrastrar y soltar un archivo de vídeo en uno de los preajustes de transcodificación, y por arte de magia crea las calidades. Los precios son competitivos.

Inteligente: control de calidad y costes

Smart significa que puede ajustar el servicio a sus necesidades específicas, en costes y calidades. Puede crear perfiles de transcodificación personalizados y seleccionar calidades. Por vídeo, puede decidir las calidades y los costes. Un nivel de control que no encontrarás en las plataformas de vídeo.

Puedes seleccionar mantener el vídeo original a la tasa de bits más alta. El transcodificador añadirá tasas de bits adicionales. De esta forma puedes transmitir hasta 8K, de forma adaptativa. Es una función que no encontrarás en las plataformas de vídeo normales.

Experto: control totalmente automatizado

Experto significa que puedes tomar el control total. Algunos ejemplos:

Un gran ejemplo experto es la función bypass. Sube medios directamente a los servidores de origen de Jet-Stream Clouds. Nosotros nos encargamos automáticamente de la transmutación. Puede ejecutar su propio servicio de transcodificación cloud local o de terceros, y subir directamente su medios a los servicios de origen de Jet-Stream, con la calidad original y prístina. Incluso puedes añadir servicios de alojamiento de vídeo de origen remoto con un solo clic.

¿Por qué la transcodificación Jet-Steam?

Con Jet-Stream obtendrá funciones sencillas, inteligentes y expertas en una única plataforma. Imagínese el ahorro de costes que supondría crear usted mismo un sitio workflow en cloud. Jet-Stream le permite realizar procesos de batch-to-ingest y puede decidir en cada vídeo qué perfil fácil, inteligente o experto se utiliza. Además, las API le permiten automatizar y controlar todo workflow.

Además, también puede ejecutar sus propios servicios de origen y transmuxers y conectar estos orígenes a Jet-Stream con un solo clic. Los servicios de origen de Jet-Stream agrupan automáticamente múltiples variantes de representación de calidad del mismo vídeo en activos lógicos. El servicio integrado de transmusión en tiempo real produce vídeos HTTP HLS y DASH adaptables.

Si quieres hacer streaming profesional, querrás usar la transcodificación para streaming adaptativo HTTP. No dudes en probar nuestro servicio y comprobar por ti mismo lo fácil y potente que es el servicio de transcodificación de MaelStrom.